Agosto 10, 2007: El camino hacia el Centro Marshall para Vuelos Espaciales es muy oscuro a las 3.30 de la madrugada. No hay iluminación urbana ni edificios en este largo camino rural. Solamente los ojos resplandecientes de los zorrillos y de los mapaches asoman entre el denso follaje de pinos. Una vez que se llega al complejo Marshall, los edificios también están oscuros, excepto uno de ellos —la Planta de Calibración de Rayos X (X-Ray Calibration Facility o XRCF, en idioma inglés). Aquí, las luces permanecen encendidas toda la noche y algunas personas la consideran su hogar.
Barry Hale (técnico principal) y Jay Carpenter (ingeniero de planta) están trabajando en el turno de la noche. Al menos dos personas deben atender estas instalaciones todas las noches, monitoreando pantallas en un largo panel ubicado en el cuarto de control. Doce personas han alternado turnos las 24 horas del día, los siete días de la semana, desde finales del mes de mayo.
"¿Por qué todas estas personas se han convertido en seres noctámbulos?" Porque el éxito del próximo gran telescopio espacial de la NASA depende de ello: "Estamos probando el Telescopio Espacial James Webb (James Webb Space Telescope o JWST, en idioma inglés)", explica Jeff Kegley, jefe del equipo en la XRCF.
Derecha: Concepto artístico del Telescopio Espacial James Webb. [Imagen ampliada] [Portal del JWST]
Programado para ser lanzado en 2013, el telescopio Webb es ampliamente reconocido como el telescopio más importante de la próxima década. Es un telescopio infrarrojo, lo cual significa que puede detectar el calor de las estrellas y de las galaxias localizadas a millones, e incluso a miles de millones, de años luz de distancia. Para captar esas increíblemente débiles señales de calor, se debe mantener al telescopio extraordinariamente frío —y es por eso que todos permanecen observando los monitores.
El telescopio Webb operará en el espacio a una temperatura de -238 grados Celsius (-396 grados Fahrenheit). Un frío tan extremo puede hacer que las estructuras y los espejos del telescopio cambien de forma. Con el fin de evitar que eso suceda, el telescopio está siendo probado en la XRCF, pieza por pieza, dentro de una cámara de vacío que simula el frío extremo del espacio. Los resultados revelan cualquier distorsión que ocurra en los componentes, de modo que se puedan efectuar cambios, si fuera necesario.
Pero hay muchas más cosas que se deben hacer durante los turnos de la noche, no solamente observar monitores con datos de prueba en el panel de control. Como la mayoría del personal nocturno, Hale y Carpenter hacen "rondas". Estas rondas incluyen salir a revisar la "granja de nitrógeno", donde monumentales tanques blancos de nitrógeno líquido yacen en la oscuridad como vacas lecheras en una pastura. Se usa el nitrógeno para enfriar la cámara de vacío donde se prueban los componentes y los hombres revisan que no haya fugas en los tanques, todas las noches.
Hale y Carpenter también han visto algunos animales verdaderos en la granja. Una noche, Hale tuvo un encuentro cercano de "tipo brusco" con un zorrillo —lo cual da un nuevo significado al concepto de hacer "trabajo de zorrillo".
Arriba: Escenas de la XRCF, de izquierda a derecha: (1) De día, el camino que lleva a las instalaciones donde se realizan las pruebas; (2) El noctámbulo Dr. Joseph Geary controla las pruebas de datos; (3) El portal de la cámara de pruebas; (4) Barry Hale en el panel de control de la XRCF; (5) Jay Carpenter da un paseo por la granja de nitrógeno al amanecer. Haga clic en los números que están entre paréntesis para ver imágenes ampliadas.
Al hacer estas "peligrosas" rondas de vigilancia, y al observar las pantallas del cuarto de control, el equipo del turno de la noche se asegura que las presiones de los equipos, las tasas de flujo, las temperaturas y las posiciones de las válvulas permanezcan en los rangos apropiados para las pruebas. Ellos también manipulan los sistemas de refrigeración de helio, la presión de la cámara de vacío y las zonas de nitrógeno líquido para que la cámara de vacío mantenga el artículo de prueba dentro un perfil particular de pruebas.
"El artículo de prueba para esta noche es una sección de la 'Caja para el Pan', del ISIM", dice Carpenter. "Así le decimos a la estructura de soporte del Módulo de Instrumental Científico Integrado (Integrated Science Instrument Module, en idioma inglés) que sostiene a los cuatro instrumentos científicos principales del telescopio". (Los nombres de los instrumentos son: el Instrumento para el Infrarrojo Medio, la Cámara para el Infrarrojo Cercano, el Espectrómetro para el Infrarrojo Cercano y el Sensor de Guiado Fino.)
Derecha: La cámara criogénica de vacío en la XRCF donde los componentes del Telescopio James Webb están siendo puestos a prueba. [Imagen ampliada]
Mientras la "Caja para el Pan", ubicada en la cámara de pruebas, soporta una transición de la temperatura, de temperatura ambiente a -233 grados Celsius (-387 grados Farenheit), un Interferómetro Electrónico de Patrón de Manchas mide ópticamente la distorsión estructural. No, no se trata de una extraña salamandra, sino de un raro instrumento. "Este es uno de los dos únicos interferómetros de mancha con desplazamiento instantáneo de fase", dice Joseph Geary, de la Universidad de Alabama, en Huntsville, quien, por cierto, también trabaja precisamente hoy en el turno de la noche. El interferómetro se está utilizando para detectar distorsiones térmicas de apenas unos cuantos nanómetros (un nanómetro es una mil millonésima de metro) en la "Caja para el Pan".
En unos cuantos días, después de que terminen las pruebas de la "Caja para el Pan", el personal reconfigurará las instalaciones para hacer las pruebas de verificación de los espejos segmentados. El telescopio Webb está compuesto por 18 espejos individuales que conformarán un grupo de espejos de 6,5 metros de diámetro. En la primavera, los ingenieros comenzarán a hacer pruebas relacionadas con la calidad de la óptica de cada espejo segmentado. Las pruebas, que se llevan a cabo las 24 horas del día, continuarán hasta el año 2010. Son muchas pruebas, muchos turnos de noche y muchos zorrillos.
Carpenter comenta que a él realmente no le importa trabajar por las noches, pero dice que "es un poco difícil para mi familia permanecer en silencio durante el día para que yo pueda dormir. Mi nieta quiere jugar, pero no se le permite tocar a mi puerta. Es un poco arduo para mí también".
Kegley dice que a él le gusta trabajar en el turno de la noche ocasionalmente porque es una buena oportunidad para adelantar trabajo. "No hay tantas llamadas ni correos electrónicos que te interrumpan a las 3 de la madrugada".